Nombre común: Bonsái de Jade – Jade – Jade Enano – Árbol de la abundancia.
Nombre científico: Portulacaria afra.
Origen: África.
Familia: Didiereaceae.
El árbol Jade es una especie muy criticada en el mundo del arte bonsái. Debido a que es una planta crasa, muchos expertos no lo consideran un bonsái. Sin embargo, pese a toda esta controversia, se obtienen muy buenos resultados al cultivarlo como uno. Continua con nosotros a aprender un poco más de esta maravillosa especie.
Características del Jade enano
El Jade es un árbol o arbusto de pequeño tamaño, llega a medir 3-6 metros. Tiene un tronco grueso y ramas finas con hojas ovales verdes, gruesas y suculentas.
Durante el otoño puede producir pequeñas flores blancas, aunque ese evento solo se da si el árbol ha pasado por un periodo de sequía duran la estación.
Existen dos especies de Jade que suelen confundirse con mucha asiduidad, la portulacaria afra y la crassula ovata. Ahora bien, la primera es la más adecuada para implementar las técnicas del bonsái, ya que tiene las hojas más pequeñas y se ramifica más fácilmente.
Cuidados del Bonsái de Jade
La planta de la abundancia es realmente muy fácil de cuidar, ya que soporta perfectamente las épocas de sequía. Sin embargo, al momento de llevarlo al mundo del bonsái, hay que tomar en cuenta los siguientes cuidados:
- Luz: este árbol es considerado como un árbol de interior; sin embargo, puedes cultivarlo a pleno sol. En cualquiera de los dos casos, debes ubicarlo en un lugar donde le dé mucha luz solar. Trata que la temperatura del mismo siempre sea superior a los 5°C.
- Agua: el Jade es un arbusto que puede mantener grandes cantidades de agua en sus hojas y tronco, por tal motivo, debes regarlo esporádicamente, solo cuando notes que la superficie del sustrato se vea seco. Durante el invierno, debes disminuir la frecuencia y regarlo cada 3-4 semanas.
- Abono: Abona tu bonsái de Jade una vez cada semana durante toda la primavera hasta finalizar el otoño, utilizando un abono líquido. Esto ayudará a que el mismo sea más vigoroso y a que tenga todos los nutrientes necesarios.
- Poda: esta planta soporta muy bien las podas constantes. Lo más recomendable es que lo hagas regularmente para que la misma desarrolle ramas en la parte baja del tronco. No utilices pasta cicatrizante porque esto puede hacer que el área de aplicación se pudra.
Transplante
Lo más recomendable es que trasplantes tu árbol al segundo año durante la primavera cuando el mismo de señales de que está reanudando su crecimiento. Emplea una mezcla de sustrato que drene muy bien, que sea poroso.
Después de este proceso no puedes regar el sustrato sino hasta después de una semana. Hacerlo de esta manera, permitirá que las raíces cortadas se sequen y no se pudran.
Recuerda, el jade es muy tolerante a las podas drásticas de cepellón, debido a su increíble capacidad de formar nuevas raíces.
Datos adicionales del Bonsái de Jade
- El Jade es muy fácil de propagar mediante la utilización de esquejes, sobre todo, durante el verano. Solo debes cortar una rama, dejarla secar por 48 horas y luego si puedes plantarla. Deja que se formen las raíces y que crezca sin pinzar ni podar, luego si puedes tratarla.
- Esta planta no soporta muy bien el alambrado, por lo que las formas de los bonsáis de Jade nunca serán excéntricas, ni muy innovadoras.